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El buitre no come alpiste


Plasencia, con sus dos catedrales, es la puerta al Valle del Jerte, el secreto mejor guardado al sur de la meseta, en la frontera norte de Cáceres, junto a otras tierras colindantes a reivindicar como la Vera, Granadilla, las Hurdes y Gata, paisajes agrestes mojados por ríos y piscinas naturales. El viejo puerto de Béjar, en la provincia de Salamanca, marca una divisoria que separa dos enclaves muy distintos: al sur, un mundo añejo y olvidado, a la vez primitivo y evocador, la tierra de mi madre. Allí surgió Extremoduro.

Tras una juventud convulsa y algún proyecto musical truncado, Roberto Iniesta quiso arrimarse a los mejores, y en Plasencia los mejores tenían nombre propio: el guitarrista Gonzalo Muñoz (Salo) y el baterista Luis Von Fanta, ambos rockeros de la vieja escuela. Como líder natural, Roberto era un tipo listo, uno de esos galgos corredores que nunca paran quietos y que muestran, para bien y para mal, una inquebrantable fe en sí mismos. Sin ese ego contumaz, aquel proyecto no habría llegado muy lejos: de poco vale el talento si no va acompañado de trabajo y obstinación. Eso fue lo que empujó a Robe a vender el primer disco aún antes de poder grabarlo, para conseguir el dinero necesario, así como viajar a Madrid y abandonar a su familia, una y otra vez, para vagabundear durante varios años por la geografía española. 

Aquel primer casete se regrabó infinidad de veces. De pronto podía oírse en cualquier bar de pueblo de Cáceres; luego, como las carabelas de aquellos conquistadores de la Extremadura de antaño, el artefacto sonoro abandonó su tierra para arribar en otros puertos. Seguía, hasta cierto punto, el legado de Leño, compartiendo a su vez espíritu con el colorido hippy de unos Lole y Manuel. Pero, a diferencia de todos ellos, la música era áspera y bruta. 'Heavy con ladillas', como la definió una vez Joaquín Sabina. Y qué decir del cantante... Roberto nunca ha tenido buena voz. ¿Qué tenía entonces de especial aquel grupo? ¿Cuál fue el secreto? 


'Como soy de campo, a mí eso del rock urbano no me llega. Yo lo llamo rock transgresivo porque las letras tienen que llegar. No es música para bailar. Hago algo que te llega, que te motiva, que te hace sentir...'

El secreto de Extremoduro fue compaginar el rock más áspero con una particular sensibilidad lírica, a la par que definir una propuesta alejada de los sonidos que se exportaban desde Madrid. Frente a la modernidad de otras nuevas formaciones, la música de Extremoduro aportaba un fuerte sabor castizo, confiado y sin complejos. En los primeros conciertos mezclaban poesía recitada, jotas extremeñas y rock duro; la asilvestrada voz del cantante y las guitarras endiabladas contrastaban con melodías sensibles y dulces canciones de amor; en las letras, la lírica más fina contrastaba con las expresiones más vulgares. El peso de las composiciones, como también de todas las decisiones musicales, pivotaba en torno a Roberto Iniesta: a fin de cuentas, él ha sido siempre Extremoduro. Individualismo feroz y una querencia por símbolos naturales. Y contra pronóstico, aquella extraña mezcla cuajó. 


Vagabundeos y continuas despedidas. Iniesta nunca tuvo reparos en romper con personas allegadas. Ni Von Fanta ni Salo, que habían aportado su magia a aquel sonido, quisieron seguirle el ritmo. Luego llegarían otros socios, destacando, por encima de todos, Iñaki 'Uoho' Antón, de los Platero, que fue quien mejor domesticó la música de Robe para contribuir a llevar a Extremoduro a lo más alto. Compositor intuitivo, con indudable talento pero escasa formación, Robe se benefició del conocimiento académico y del buen hacer de Iñaki en la producción. Instalados en el norte, cerca de Bilbao, la dupla se consolidó durante años, hasta que la historia se repitió y, no hace tanto, se confirmó la ruptura definitiva. 

Fue hace tres años cuando prometieron un último concierto, que impidió la pandemia. Algunos esperábamos verlos tocar por última vez, pero ya no será posible. De nuevo, Roberto vuela solo, haciendo honor a sus letras y su biografía. Personaje complicado, buitre que no come alpiste. 'Rock transgresivo', 'Somos unos animales', 'Deltoya', 'Agíla', 'Yo, minoría absoluta', 'La ley innata'... Dejaron para la posteridad un puñado de grandes discos que pertenecen a la banda sonora de una o dos generaciones; a algunos nos marcaron sin remedio y han influido a no pocos artistas del rock español. Ahí es nada.

Comentarios

  1. Yo descubrí o mejor dicho empecé a escucharles con atención, a partir de su álbum “la ley innata” que creo que es de 2008 o por ahí ¡una maravilla!, para mi, lo mejor que les he escuchado, como ves bastante tarde y claro, la producción de sus discos no tenía nada que ver con sus inicios, de hecho lo que me sorprendió fue que de pronto un grupo rockero español no sólo introdujera chelo, violines …piano, si no que encima tuviera toques de música barroca, entradas arpegiadas al más puro estilo de Bach o maravillas como “Segundo movimiento: Lo de fuera” o ESTE que meencanta. La producción y sus arreglos musicales hacían que esta banda fuera mucho más que unos meros rasga guitarras, esto es otro nivel y aunque, lo mejor de su música para mi, siempre fueron sus guitarras, por ejemplo mira AQUÍ ; ) Y sí, es verdad, Robe no tenía voz, pero tenía alma, y sus letras, como las de MAREA, que aunque pueda sonar a barbaridad a mi siempre me parecieron la versión mejorada de EXTREMODURO, porque Kutxi Romero tenía la voz, escribía letras geniales, a veces pura poesía , en modo bestia, pero poesía, en fin, que creo tenía todo lo que le faltaba a Robe, aunque como trayectoria y música fueran mucho más limitados, de hecho creo que Uoho de EXTREMODURO tocó en MAREA, antes en PALTERO Y TÚ y tb con Fito & Fitipaldis, que tb meencantan ; ) todos los miembros de estos grupos se mezclaban colaborando entre ellos, incluso para promocionar a Manolo Chinato, poeta amigo de Robe, que escribió la letra de muchos temas de EXTREMODURO, (Ama, ama y ama y ensancha el alma por ejemplo ) bueno, pues montaron el grupo EXTRECHINATO y TÚ uniéndose en aquel proyecto Robe, Fito y Iñaki Uooho, por eso se me mezclan mucho sus músicas, es como si al formar parte de diferentes grupos al final recuerdas la música pero sin poder precisar en qué proyecto musical estaban porque son muy ellos en todo lo que hacían, tocaran donde tocaran. La verdad es que de EXTREMODURO se más bien poco, así que mil gracias por toda la información, que…¡mira que sabes! a lo mejor tb eran vecinos tuyos de cuando ibas al pueblo de tu madre ; ) Un gusto leerte.

    Un abrazo!

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    1. 'La ley innata' es una maravilla, totalmente de acuerdo. A mí me han acompañado siempre, así que veo distintas virtudes en cada época, pero se aprecia esa continua voluntad de superación. Aquí quería dejar un comentario a vuelo de pájaro, pero igual hago una sencilla entrada comentando algunos de sus trabajos por separado. Los discos son lo que importa, a fin de cuentas, pero también fueron mejorando, y mucho, en las actuaciones en vivo.

      En cuanto a Marea, me gustaron bastante sus primeros tiempos (y también los disfruté en varios conciertos) y los sigo respetando. Su tercer álbum me parece el mejor, aunque en general me parecen más un grupo de canciones que de álbumes, porque han sido muy continuistas, nunca han dado sorpresas. Y eso que han aportado buenas canciones a lo largo de toda su carrera. Las comparaciones con Extremo se dieron desde que comenzaron su andadura, y Kutxi Romero siempre lo aceptó con gusto y humildad; a fin de cuentas, Extremoduro fue el grupo que más les influyó, a pesar de todas las diferencias.

      Pero si hablamos de comparaciones, para mí no hay color. Eso también lo aplico a las letras: las de Marea, sin ser nada malas, en general me suenan un poco más artificiales, y eso que su uso de metáforas en ocasiones me parece brillante. El propio Kutxi, desde su campechanía, lo expresó así en una entrevista: ''mis letras son más retorcidas que el rabo de un cerdo''. Pero esto es cosa de gustos, así que está muy bien que prefieras las canciones de Marea, si te llegan más.

      'Extrechinato y tú' fue un proyecto corto, un solo álbum en el que colaboraron Extremoduro y Platero y tú, como dices con las letras de Manolo Chinato. Ambos grupos fueron muy amigos y compartieron algunas giras, y finalmente Iñaki abandonó Platero para pasar a ser miembro oficial de Extremoduro, además de productor de otros grupos, incluyendo Marea. En cualquier caso, 'Platero y tú' estaba finiquitado, porque ya no daban más de sí y Fito tenía sus propios planes (y le ha ido muy bien). El que quedó un tanto resentido con el apaño, por sentirse abandonado, fue Juantxu Olano, bajista de Platero.

      Por su parte, Kutxi Romero, de Marea, siempre ha sido un fan en el mejor de los sentidos, un músico dispuesto a colaborar con otros músicos, y más con aquellos a los que admira. En toda esta tropa, el rara avis ha sido siempre Robe Iniesta, que ha mantenido su individualidad incluso en los momentos en los que ha trabajado mano a mano con los otros. Hoy en día, de hecho, está distanciado de todos ellos: la ruptura con Iñaki es la más dramática, al haber sido uña y carne y haber compartido, además de Extremoduro, un sello discográfico que montaron juntos (y lo montaron con valentía, en el peor momento de la industria).

      Muchas gracias por el comentario, María. Un abrazo.

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  2. Una idea se ha consolidado en mí con los años, tras empezar a escuchar a Extremoduro alrededor del año 2000: creo que es el mejor grupo que ha dado el pop/rock español desde los 80 y en esa década superaría a la mayoría de los grupos.
    Curiosamente llegué a Extremoduro poco a poco, por amistades y familiaridades con gente mucho más joven que yo, pero mereció la pena. Es cierto que esa imagen de Robe como Cristo en procesión, revela un divismo inaudito, pero es que al final canción a canción la factura es de una potencia desbordante tanto en letras como en lo estrictamente musical.
    Y se lo han currado, porque gran parte de la crítica los miraron siempre con desprecio. No sé si por no ser parte del cogollito moderno madrileño o por vivir y reivindicar su origen extremeño y de pueblo.
    Apunto el dato que comparto: Extremoduro es el sucesor natural de Leño.
    Saludos

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    1. Suscribo todo lo que dices. A mí también me parecen el mejor grupo de rock español desde los ochenta, con una fuerte personalidad y una evolución muy interesante. Es además un caso notable por lo que dices: triunfaron por sí mismos, sin promoción ni ayuda de la industria, y pasando por momentos difíciles. A pesar de todo su empeño, Robe Iniesta tenía ya mujer e hijos y malvivía en sofás de colegas en casas ajenas en Madrid, Barcelona, Vitoria o Bilbao, por lo que estuvo a punto de retirarse y volver a la chapistería de su padre (ese es el 'Evaristo' de 'Jesucristo García'). Finalmente el éxito llegó y todavía tardaron tiempo en darles el crédito que merecían.

      Un saludo.

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